Día de la mujer, mi particular homenaje.

Escucho en numerosas ocasiones en la televisión actos reivindicativos para acabar con la violencia del hombre a la mujer, discursos cuyo fin es acabar con el machismo y, entre otros, actos que se centran en mirar los aspectos positivos de las mujeres. Escucho también en mi día a día discursos de muchas personas que defienden que la mujer posea igualdad en las oportunidades sociolaborales que el hombre y, entre otros, personas que apuestan por luchar para acabar con la violencia del hombre a la mujer. Sin embargo prácticamente nunca escucho ni en la televisión ni en mi vida diaria actos o discursos en defensa de los derechos del hombre. No, prácticamente nunca los escucho.

Considero que nos encontramos con una sociedad en la cual se discrimina al hombre y no sólo a la mujer, y, sin embargo, no somos consciente de ello. Hoy, un día antes del día de la mujer, hago mi particular homenaje en esta entrada a esta celebración, con la cual discrepo ya que que exista la celebración de este día y que, además, no exista la celebración del día del hombre no es sino una muestra más de lo ya dicho. No obstante, aclaro, yo no apuesto porque exista un día del hombre y uno de la mujer, apuesto porque exista uno en el que se celebre la igualdad de oportunidades entre hombre, mujeres e intersexuales.

Para pensar que existe en la sociedad española discriminación hacia el hombre me baso en las siguientes características sociales que percibo. Siempre basándome en la realidad que me rodea y no pudiendo extrapolar ésto a la sociedad en general, ya que no conozco una por una a las personas y las situaciones que las componen. Las características en las que se basa mi opinión son las siguientes:

- No aceptación total de la sociedad para que los hombres desempeñen ciertas profesiones y deportes: deportes tal y como la gimnasia rítmica, la natación sincronizada (no estando en estos dos últimos deportes permitido legalmente que compitan hombres), o el patinaje artístico y profesiones tal y como limpiador o niñero.

- No aceptación total de la sociedad para que los hombres posean determinados sentimientos y/o rasgos de personalidad: ser sensibles, llorar, ser empáticos, ser débiles emocionalmente hablando, etc.

- Violencia de pareja (la mal llamada violencia de género, ya que también existen parejas compuestas por personas de un mismo género y sexo y con esa nomenclatura las excluimos): Este tipo de violencia también la sufren los hombres, aunque los medios de comunicación no lo difundan, existe y además mucho mas de lo que nos creemos, hablo de maltrato tanto psicológico como físico. En este caso los hombre maltratados no disponen de teléfonos de atención, de leyes (las leyes hablan exclusivamente de las mujeres, y además, sólo de si su pareja es un hombre, en el caso en el que sea una pareja de dos mujeres, tampoco lo cubre la ley), de centros, de mentalidad social que los proteja etc.

Si un hombre es maltratado necesita de todo ésto, independientemente de que existan o no mas mujeres maltratadas que hombres, y sin embargo no lo posee. Da igual quien sea el maltratador, todas las victimas debemos de tener los mismos derechos y eso, hoy por hoy en España, no es así.

- Discriminación social positiva de la mujer y negativa hacia el hombre en determinados aspectos: en considerables ocasiones a las mujeres se les permite entrar gratis en una discoteca (el hombre sin embargo en bastantes ocasiones ha de pagar, si ésto fuese al revés, y fuera la mujer la que debiera de pegar y el hombre no, seguro que se armaría un gran escándalo); levantarse en un bar a pedir y recoger la comida en gran parte de las veces es el hombre quien frente a la mujer lo hace (sino, si queréis, fijaros cuando estéis en un bar, es alucinante); en las discusiones de parejas compuestas por hombre y mujer, si la mujer habla en un tono alto o incluso le pega una bofetada al hombre no se ve igual de mal que si es al revez, sino fijaros en las escenas televisivas y lo apreciareis; el hombre es quien abre la puerta a la mujer o coge cosas con un mayor peso, lo cual además de ser aceptado socialmente es premiado y considerado como algo positivo.

- Dominio psicológico de la mujer en la mayoría de las parejas compuestas por hombre y mujer que conozco: la mujer decide mayor mente que hacer, mayor control emocional y psicológico, mayor relación de la pareja y de sus hijos con la familia materna, etc.

- Educación de los hijos: según he podido percibir en la realidad que me rodea, en los niños que poseen un padre y una madre es la madre quien, en última instancia y a nivel práctico, determina la educación del niño; además en dichas parejas heteroparentales gran parte de las custodias son asignadas a las madres (ante ello me pregunto, ¿casi ningún padre quiere la custodia de sus hijos? y ¿casi todos los padres no son aptos para obtener dicha custodia? a lo cual mi experiencia vital me responde negativamente, ya que el querer educar a unos hijos y la eficacia o no para ello no va en el sexo sino en la persona); etc.

Éstas características considero que no las tienen en cuenta muchas de las personas de esta sociedad debido a que, entre otros, los medios de comunicación y las fuerzas políticas desvían nuestra atención. Haciéndonos así creer que sólo existe una parte de la realidad, la que está de moda, la discriminación de la mujer, la cual existe, por supuesto que sí, pero no es la única discriminación existente. Y, sin embargo, nos hacen que veamos que es la gran protagonista y que obviemos, entre otras, la discriminación hacia el hombre, la cuál, también existe, y también, por supuesto es importante.

Considero que debemos luchar por conseguir la igualdad de trato y de oportunidades, para todos, sea cual sea nuestro sexo. Yo apuesto por conseguir la igualdad mediante la igualdad, no mediante el hembrismo . Sin más, gracias por vuestra lectura.